Este fin de semana he dedicado parte de mi poco tiempo libre a ver por televisión la eliminatoria de cuartos de final de la Copa Davis entre España y Alemania, disputada en Marbella. A falta de fútbol y de Sevilla FC, se trata de una de las cosas que más me llaman la atención en lo que a deporte se refiere.
Yo soy gran aficionado al tenis. Pero no ahora que Rafa Nadal lo gana casi todo, y tiene una enorme repercusión mediática. Ya lo era cuando Emilio Sanchez Vicario era el único español que medio destacaba en un deporte dominado entonces los John McEnroe, Ivan Lendl, Stefan Edberg, Mats Wilander o Boris Becker. Y también cuando Sergi Bruguera ganó dos veces consecutivas Roland Garros (una de ellas ante Alberto Berasategui), y llegó a una tercera final (que perdió con Gustavo Kuerten). O cuando Carles Moyá fue numero uno del mundo en 1998. También en la época dorada de Juan Carlos Ferrero (otro nº 1), que coincidió con gente tan buena como Alex Corretja o Albert Costa. Fue ya después cuando apareció un jovencito llamado Rafael Nadal, que acabó por convertirse en el mejor deportista español de todos los tiempos. Pero eso fue después. Hubo un antes de Nadal en el tenis español. Un antes muy exitoso, aunque quizás no tan mediático.
La eliminatoria la ganó España por 3-2, y nos enfrentaremos en septiembre a Israel (en casa), en busca de nuestra segunda final consecutiva. El éxito es muy grande, pero mucho más teniendo en cuenta que no estaban Rafael Nadal ni David Ferrer. Del mallorquín poco hay que decir. Y respecto al alicantino (Ferrer), resaltar que aunque últimamente ha bajado un poco en el ranking, el año pasado se mantuvo en el cuarto puesto, o sea, en el primero de los mortales, detrás de los entonces insuperables Nadal, Federer y Djokovic (este año les ha dado caza el escocés Andy Murray). No es que Alemania sea una super potencia tenística, pero tampoco son mancos. No se puede serlo y llegar a unos cuartos de final del Grupo Mundial. Y el hecho de que España les haya superado sin contar con dos de sus mejores jugadores dice mucho del fondo de armario del tenis español.
Y es que aquí hay mucho más que Nadal y sus grandes éxitos, aunque la prensa mire un poco hacia el otro lado cuando no juega nuestro enorme número uno. La selección española fue liderada por Fernando Verdasco, un jugador en franca ascensión. Los aficionados al tenis nos hemos dado cuenta de que el madrileño aparece con enorme frecuencia por los cuartos de final de los torneos que disputa últimamente. Es cierto que eso destaca poco. Que lo que de verdad importa es llegar a finales y ganarlas. Pero estar en los cuartos de final quiere decir ser uno de los ocho mejores. Y efectivamente, Verdasco se ha consolidado en el top ten mundial, lo cual es algo extraordinario. Curiosmente su ascensión se inició justo cuando se conoció su relación con Ana Ivanovic, una de las tenistas más atractivas del circuito. Todo ayuda, supongo. Lástima que se le vaya la cabeza con tanta facilidad, hasta el punto de perder de la forma que lo hizo su segundo partido de esta eliminatoria. Cedió los dos primeros sets, hizo lo más difícil empatando la contienda, para acabar cayendo en en quinto por 8-6. Si eso no es irregularidad... Pero no pasa nada, porque España ya ganaba 2-1 antes de esta derrota (tras las victorias de Verdasco en su primer partido de individuales y en el de dobles junto a Feliciano López) y en el último encuentro, un rejuvenecido Juan Carlos Ferrero se ventiló al nº 2 alemán (Andreas Beck) para certificar el pase de nuestro equipo a las semifinales.
Si el año pasado ganamos la final de la Davis en Argentina sin Nadal, ahora pasamos a semifinales sin nuestro nº 1. Eso no quiere decir que no nos haga falta, pero sí que, aunque los medios hagan poco caso, nuestro tenis goza de una excelente salud en estos momentos.
Pero lo que más me llamó la atención fue otra cosa completamente distinta. Y me explico. En los últimos años han habido varios intentos de ponerle letra al himno nacional español, o de inventarse un himno paralelo que cantar en las competiciones deportivas. Un medio de comunicación u otro sacaba una especie de concurso al respecto, que no salía adelante porque todo giraba en torno a intereses creados. No querían una canción con la que animar a nuestras selecciones, sino apuntarse el tanto unos u otros. Los que fueran. Y claro, a la hora de hacer las letras se la cogían con papel de fumar, no fueran a ofender a tal o cual minoría con sensibilidades independentistas. Nada de hablar de España, ni de patria, ni de orgullo nacional... nada de nada. Al final lo que pasaba era que salían tales churros de letras que eran mandadas a la basura por quien fuera a las primeras de cambio.
El deporte es mucho más que eso, y si no que se lo digan a nuestros tenistas. Mirad sino este video, en el que se ve cómo se animan nuestros jugadores antes de los partidos. La letra de la canción (de lo más sencilla) es la siguiente:
Pasan los años
Pasan los jugadores
Es por un sueño
Que vamos a luchar
Vale la pena
La roja es lo más grande
El público que cante
Que salte sin parar
Por eso yo te quiero dar
Mi co mi corazón
Yo te sigo a todas partes
Gracias por ser español
Música: La Mosca Tse Tse
Letra: Feliciano Lopez y Albert (sí, Albert) Costa. (vaya par de artistas)
¡Gracias por ser español! Alguno se estará rasgando las vestiduras, igual que pasó el año pasado cuando Nadal paseó la bandera de España tras ganar el oro en la Olimpiada (hay quien piensa que ser mallorquín es como ser catalán, pero nunca español), o cuando Pau Gasol hizo aquel sublime anuncio de televisión en el que defendía su orgullo por defender los colores de su país, y a alguno de Esquerra Republicana le salió hasta urticaria al ver a un catalán diciendo eso. (¿No gana Gasol lo suficiente como para negarse a hacer algo así caso de no querer hacerlo?) O también como cuando nuestro Sevilla FC decidió estampar una banderita de España en las camisetas que se utilizaban para jugar en competiciones europeas. Nos cayeron palos por todos lados. Total, para que al final la inmensa mayoría de los clubes nos imitaran en ese empeño. Si es que hay que ser necios.
No quiero parecer un patriota trasnochado. Os aseguro que no lo soy, pero lo cierto es que admiro la sencillez con la que este grupo de tenistas representa a nuestro país, y se enorgullece de defender esos colores igual que los sevillistas defendemos nuestro escudo (por poner un ejemplo cercano). Esos colores rojo y amarillo que con tanto mezclar política y deporte están consiguiendo que deje de considerar también mios.
Enhorabuena, tenistas. Me habeis recordado que yo también estoy agradecido por ser español. Sobre todo si sois vosotros los que me representais.
5 comentarios:
Saludos.
¿Y los de Hockey sobre patines?
Tercer campeonato del mundo consecutivo. Y van 14.
Lo que me asustan son las fronteras mentales, lleven el color que lleven.
Cuídate.
se demuestra una vez mas que el tenis español esta muy en alza y que la armada española,con o sin rafa nadal raya a una altura dificil de seguir,la estela de nuestros chicos,aun es muy larga y tenemos el futuro inmediato garantizado,pero ojo aqui te resbalas un poco y te roban la cartera en un momento,caso recientisimo la perdida del nº 1 de rafa por la última lesión,yo tambien estoy orgulloso de ser español,pero sobre todo de ser sevillista y amigo de gente como tú,espero conocerte en la próxima ravesen,has sido uno de los pocos blogueros que me han faltado abrazar y estrechar,cuidate hermano,nos vemos pronto.
Vaya, parece que en lo que es el tenis no estamos tan de acuerdo como en el fútbol. A mi también me encanta el tenis. Pero los tenistas españoles que no son Rafa Nadal me parecen un poco mediocres (que conste que hablo en el contexto de tenis de élite, yo no podría decir que son mediocres si yo no lo puedo hacer mejor). Este David Ferrer me parece que es especialmente desastroso, y que esta aún viviendo de un año bueno que tuvo. Los demás, normalitos. Pero bueno, en Copa Davis se esconden las carencias y puede que tres tenistas normales ganen a un crack y dos malos. Juan Carlos Ferrero es el que técnicamente me parece mejor (excluyendo a Nadal). Ha sido curioso, ha bastado que se autoamenace a si mismo con la retirada para volver a conseguir buenos resultados, como en Wimbledon y en Queens. Si no fuera por esa mente que tiene, que parece que es un poco complicada, hubiera llevado mejor trayectoria.
Mi tenista favorito es Roger Federer. Me ha dado un poco de asco cuando un patriotismo culto y sano como el que hablas se convierte en un chovinismo rancio y repugnante. Con tal de ensalzar a Nadal (también será de los mejores de la historia) se han llegado a decir auténticas burradas del suizo.
Buen post, está bien que haya variedad de temas y se toquen todos los palos.
Un saludo.
@J.M. Ariza
Se trata del tenis, del hockey y de todos los deportes que no sean el fútbol. ¿O es que si no deja dinero no es deporte? ¿O es que el futbol ha dejado de ser un deporte para los medios?
@Magase
De lo que me quejo es de que sólo se haga caso de un deporte o de un deportista cuando deja dinero. Y que también sea por dinero cuando se saca el orgullo patrio. Yo aborrezco que intenten convertirme en un consumista de lo que otros venden.
@Gol Sur Tribuna Alta
No se puede estar de acuerdo en todo :). De todos modos, yo me refiero en este post al tenis como selección, no a los individuales. Si Ferrer tuvo un año bueno el pasado, este lo será para otro y el que viene para el de más allá. El caso es que no paran de salir tenistas, y hoy dia pocos países pueden presumir de algo así.
Luego, si hablamos de estos de forma individual entramos en otro debate.
Y respecto a Federer... el señorío del suizo ya lo qusieran para ellos muchos meapilas disfrazados de periodistas. Hablamos del mejor tenista de la historia. Es para cuadrarse delante de él. Nadal ya lo ha superado en una ocasión, pero aún tiene que demostrar que es capaz de mantenerse en las alturas tantos años como él. Eso es lo dificil de verdad
Un saludo a todos, y muchas gracias
un post muy acertado crack! lo comparto al 100%
un abrazo y espero que tu niño ya sea mas sevillista que el escudo ! jaja
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