Esto es lo que ha dicho Jose Luis Astiazarán, presidente de la LFP, que están buscando para solucionar el problema de la huelga de futbolistas. Propuestas imaginativas, a saber qué se les está pasando por la cabeza.
Como suele ocurrir, en este conflicto cada uno habla de lo que le interesa, pero sin llegar nunca al fondo de la cuestión. Es desesperante tener que escuchar continuamente un eslogan tras otro, pero ninguna explicación convincente de ninguna de las partes, lo cual mosquea mucho al principal afectado por toda esta situación: el aficionado (como siempre, la parte más débil). Y es que a mí no me cabe en la cabeza que unos tipos se lleven hablando seis horas para no llegar a ninguna solución, y que las explicaciones se limiten a repetir una vez más los eslóganes que cada uno de ellos defiende. Cuatro palabras y a seguir "negociando".
Y, ante esto, a mí me ha dado por investigar un poco, no mucho, pero sí algo que me permita entender un poco más esta situación. Las relaciones entre AFE y LFP ya venían deterioradas desde hace tiempo (con varios amagos de huelga), y estalló definitivamente en diciembre de 2010 cuando el sindicato de futbolistas presentó una denuncia ante la Sala de lo Social de la Audiencia Nacional (en teoría quien es competente en materia de conflictos colectivos que sobrepasan el ámbito de las Comunidades Autónomas). El motivo de esa denuncia era la negativa de los jugadores a disputar partidos el 2 de enero (cuando estaba programada una jornada de liga), ya que en el convenio colectivo que estaba vigente (y que expiró con el fin de la temporada 2010/2011) se contemplaba que, como muy pronto, sólo se podía jugar a partir de los días 3 de dicho mes. Antes de presentar esa demanda, habían intentado llegar a un acuerdo para trasladar la jornada íntegra al lunes día 3, pero como era lunes y aquí mandan las televisiones, pues la LFP se negó. Tal y como estaba previsto, obligó a jugar la mitad de la jornada el domingo, y la otra mitad el lunes.
Al tiempo que presentaban la demanda, amenazaron con no disputar los partidos del día 2, pero la Audiencia Nacional se declaró incompetente para ese caso al considerar que se debería haber seguido la vía contencioso - administrativa, y no la social, ya que el calendario lo elaboró la RFEF, por delegación del Consejo Superior de Deportes, en un acto administrativo. La AFE tenía conocimiento de dicho calendario antes de su publicación (en julio), y era en ese momento cuando deberían haber presentado la demanda por lo social, ya que sin su beneplácito no se podía aprobar. Pero una vez publicado, ya es acto administrativo. Por tanto, la jornada se disputó en las fechas señaladas. Claro que uno no comprende bien que si el calendario se hizo en verano, por qué esperaron a diciembre para formar el Cristo, lo cual me lleva a sospechar que hay mucho más detrás de todo esto y que tal cosa no era más que una medida de presión en busca de otros objetivos.
A pesar de lo lastimoso de su tono cada vez que se pronuncian en público, a mí los de la AFE nunca me han parecido trigo limpio, y este tipo de cosas no hacen más que confirmar mi opinión. Claro que, comparados con los de la LFP, son casi hermanitas de la caridad, que se lo pregunten si no a José María Cruz, que al ver el percal se marchó de allí por patas.
Pero esto no quedó aquí, ya que la LFP denunció el convenio en enero. Esto suena muy fuerte, pero no es lo que parece. Cuando un convenio llega a su fin puede ser prorrogado si ninguna de las partes dice lo contrario. Pero si una de las partes no quiere que eso ocurra, tiene que decirlo. Y a eso se le llama "denunciar". Igual deberían buscar una palabra menos contundente, pero es lo que hay. Por tanto, una vez denunciado, comenzaba la negociación de uno nuevo que aún no ha terminado y que nos ha llevado hasta la situación en la que nos encontramos hoy.
Las diferencias entre AFE y LFP en esta negociación eran muchas: que los partidos internacionales no computen como vacaciones, que no se obligue a ceder los derechos de imagen de los jugadores a los clubes, que no sólo haya medidas paliativas (solución de problemas) sino también preventivas (que no lleguen a surgir esos problemas), que la LFP no pueda llegar a acuerdos unilaterales, sino que tenga que tener en cuenta a la AFE para ellos, etc. Y, sobre todo, que se garantice el cobro de los salarios de los jugadores, y en este sentido, que se aumente el fondo de garantía salarial (fondo al que contribuyen todos los equipos y que se usa para pagar las deudas que los clubes morosos tienen con los jugadores). En el convenio recién expirado, ese fondo ascendía a 6 millones de euros para los clubes de Primera, algo ridículo con las cifras de deuda que se manejan a día de hoy.
Pues bien, casi todos estos problemas que parecía haber resulta que se han solucionado en las maratonianas reuniones de estos días, incluso la LFP ha aceptado la propuesta de la AFE mediante la que se pedía que los clubes que se acogieran a la Ley Concursal descendieran de categoría. Claro que eso no es nada del otro mundo, ya que actualmente se encuentra en trámite un proyecto de reforma de dicha Ley para impedir que los clubes de fútbol puedan aprovecharse de esta y suspender pagos sin miedo a castigos deportivos.
En lo único en lo que aún no hay acuerdo es en las garantías de pago de ese fondo del que hablaba antes. Han acordado ya incluso la cantidad, según parece. Y este es otro tema que me hace seguir pensando que la AFE no es trigo limpio. Resulta que una de las condiciones que la LFP ponía para aceptar un aumento del fondo de garantía era que se asegurase que ese dinero iría a parar única y exclusivamente al pago de los salarios de los jugadores acreedores, y no a la financiación del sindicato. Y esto sí que clama al cielo. Además, como resulta que se le llama sindicato por llamarle de alguna manera, pero que en verdad son asociación, su financiación debería llegar de las cuotas de los asociados, y la LFP argumenta, y con razón, que en esa asociación hay personas lo bastante pudientes como para mantenerla sin necesidad de ayudas externas. Pero pudientes de verdad, ¿no os parece?
Aquí hay algo que no huele bien, está claro, y la peste viene del lado de la AFE.
Para colmo, según se informa, uno de los conflictos que había era sobre la cantidad del fondo. La AFE decía que la deuda ascendía a 52 millones de euros, mientras que la LFP, tras revisar los concursos de acreedores, sólo reconocía 35. Pues bien, la AFE ha decidido dar por buena esa cantidad de 35. ¿De qué estamos hablando? ¿Qué coño es esto? ¿De golpe y porrazo lo que se le debe a los futbolistas ha bajado en 17 millones? ¿Qué quiere decir esto? ¿Que habrá futbolistas que no cobrarán? ¿Que cobrarán todos, pero menos de lo que se les debe? ¿O que esos 17 millones de euros eran para otra cosa, y que han aceptado renunciar finalmente a ellos?
No acuso a nadie de nada, pero no me negaréis que esto huele fatal.
Finalmente, una vez llegado a un acuerdo en todo y aceptada la cantidad del fondo de garantía salarial que aparecerá en el nuevo convenio, sólo queda la controversia de las garantías bancarias, o avales, o lo que sea que asegure que esas cantidades se conseguirán cuando llegue el momento. Es el único punto de discordia que queda, y es de prever que esta tarde llegarán a un acuerdo final para que este fin de semana haya liga.
Como veis, la cosa es tela de compleja, viene de lejos, y va mucho más allá de los cuatro conceptitos con los nos machacan tanto unos como otros. Y lo de las "propuestas imaginativas" de las que habla Astiazarán se deben referir a que no saben bien cómo convencer a los futbolistas de que esos dineros estarán cuando haga falta. Y no me extrañan las reticencias de los jugadores, en vista de la situación de muchos de los clubes que componen la Liga y que son los que tienen que poner ese dinero.
De todos modos, yo creo que esta tarde acabará todo. Llegados a este punto, resultaría bastante extraño que la cosa no fuera así.
5 comentarios:
Cada dia que pasa el ridiculo es mas espantoso
Esos 17 millones son para mandarlos a todos a .....
Sigo pensando que ese fondo lo deben poner lso futbolistas, que la AFE debe prohibir a sus jugadores fichar por equipos deudores (solidaridad con los impagados), y que si hay huelga se haga de verdad, Supercopas, entrenamientos y Gampers incluidos...
Un saludo
Totalmente de acuerdo con Santiago Mora.
Saludos cordiales
Vamos que con el dichoso fondo salarial lo que la AFE pide es que los equipos que gestionan bien paguen los salarios a los equipos deudores.
Ejemplo: El Depor le pague el sueldo a Falitta, jugador del Zaragoza, por el que el Depor todavía no ha cobrado el traspaso. Me parece un poco raro que los equipos acepten esto.
Pues por fin hubo acuerdo, aunque no sabemos en qué consiste. Yo al menos no he sido capaz de encontrar información sobre ello. En especial, no sé si el fondo de garantía será de 35 o de 52 millones, no tengo ni idea.
La cosa no deja de oler mal. Afortunadamente, pronto dejará de ser posible aprovecharse de la Lay Concursal. A ver cuántos equipos descienden el año que viene.
Muchas gracias a todos, un saludo
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